1.

Ecos de historias
retumban sobre mi mente,
necias acusaciones
maldades intencionadas
por antipatías de antaño.

Fingir lo provocado,
quedar impune,
objetivo lejano,
para tal desengaño.

Juzgar al mundo,
sencillo cometido,
afrontar sus heridas,
soledad punzante.

Las llagas
sobre tus manos,
queridos seres
escupen sobre ti.

Nadie camina
por tu senda de espinas
tan sólo el helado viento
azota tus miembros.

Pregúntate
si tal sacrificio
merece tu felicidad.

Si tus brazos
me arropan
yo te consolaré.

 

2.

Ánimo de sobremesa
sobre el oculto dolor
de un ignorado corazón.

Decisiones pretenciosas
para una vida diferente,
consideradas por alguien
para embarcar a otro.

Problemas arrastrados
de tiempo atrás;
pero caían sobre el futuro.

Mirada de lluvia
sobre tierra virgen,
intransigencia sin control
en una vida común.

Labio sobre labio
puede que no apgue
el dolor
de otro tiempo.

 

3.

El fuego,
traspasa las vestiduras,
el cerebro,
puro volcán
de lava incandescente.

Pensamientos a la deriva
sin control humano posible,
la natura se ha vuelto loca.

Fogosidad pasional
bloqueados en el tiempo,
desear sobre las sábanas
recuperar el sudor perdido.

En el infierno,
nada provoca,
una vez muertos
¿por qué no pecar?

 

4.

Oscuros anhelos
sentimientos amargos,
senderos perdidos
del frío paraíso.

Golpea el viento
cada miembro rezagado
crea la canción a su paso.

Bailes de verdes copas
a lo lejos,
simulan el fúnebre deseo.

Virutas escarlata
brotan del vientre
de la niñez manchada.

Preguntas sin respuesta
ante la incompetente grandeza,
tras la tierra de los muertos
quizá traiga la luna su magia.